jueves, 4 de febrero de 2010

COMO LAS BASES CONTROLAN A SUS DIRIGENTES Y/O LOS REVOCAN

V. EL CONTROL DE LOS DIRIGENTES POR LAS BASES
120. Una de las razones esenciales por las que en muchos lugares el trabajo no progresa es por la ausencia de un grupo de dirigentes sólidamente ligados a las masas y que permanecen constantemente sanos.
121. Para lograr esto, es importante establecer mecanismos que permitan el control de los dirigentes por la masa y su substitución en caso de que hayan degenerado en sus métodos de dirección.10
¿De qué manera puede controlar la masa a sus dirigentes?
122. El control de las masas se ejerce a través de la elección de sus propios dirigentes, de la participación en la elaboración del programa de acción que éstos van a conducir, de pedir cuenta periódicamente acerca del desarrollo del programa, y, por último, de revocar el mandato a los dirigentes cuando éstos han dejado de cumplir su papel.
Veamos esto con mas detalle.
123. En primer lugar, es importante determinar la forma en que deben ser elegidos los dirigentes. Una dirección verdaderamente unida a las masas se constituirá progresivamente en la lucha misma de las masas y no separada de ellas. Esto significa que los dirigentes deben surgir de la masa misma y en relación a las tareas que ésta emprenda y que constantemente se debe permitir que los nuevos elementos que se van destacando en el curso del trabajo y de la lucha, vayan substituyendo a los dirigentes que han perdido fuerza y contacto con las bases.
10. Aquí nos vamos a referir especialmente a la relación de los dirigentes con la base en las organizaciones de masas. - 18 -
124. Para elegir a un dirigente, las masas deben tomar en cuenta sus características personales: su claridad frente a los problemas, su capacidad de iniciativa y de mando, su honestidad, su dedicación a la causa, etc. Pero no sólo eso, sino que deben elegir a los dirigentes más capaces para llevar adelante una determinada línea de acción. Aquí podemos recordar el ejemplo de los mapuches, que se daban un tipo de jefe el cacique para tiempos de paz, y otro distinto el toqui para tiempos de guerra. El cacique era el miembro más viejo del grupo, porque se suponía que era el más sabio para solucionar los problemas de la vida diaria. En cambio, para conducir al grupo en la guerra se elegía de entre los jóvenes, al más fuerte, al de mayor resistencia física, etc sometiéndosele a pruebas que demostraran estas características, como ocurrió con el toqui Caupolicán.
125. Es por ello que las grandes líneas de acción deben ser elaboradas por todos y ampliamente discutidas en el grupo correspondiente antes de elegir a quienes van a ponerlas en práctica como dirigentes.
126. Todos deben aportar sus ideas, sus experiencias. En este sentido es muy importante que los dirigentes antiguos rindan cuenta de su gestión anterior, para que la masa pueda establecer en qué fallaron y en qué tuvieron éxito. Una vez elaboradas las grandes líneas de acción en un programa, una vez que se ha hecho un análisis crítico de las acciones y los dirigentes anteriores, la masa sabrá quiénes son los mejores hombres para dirigir las acciones futuras.
127. Los dirigentes elegidos deben resumir estas grandes líneas de acción en un programa de acción concreto y comprometerse a llevarlo a cabo.
128. De esta manera la masa sabrá qué exigir a sus dirigentes y controlar si lo realizan en buena forma. A su vez, teniendo claro qué es lo que se va a hacer, todos pueden colaborar efectivamente a su desarrollo. Esto de ninguna manera significa que los dirigentes deban limitarse a hacer lo acordado: en determinados momentos ellos deben tomar resoluciones por su cuenta y siempre usar su iniciativa, para hacer que el programa acordado se desarrolle según las circunstancias objetivas.
129. Debido a este margen de libertad que tienen los dirigentes para tomar decisiones y variar la acción en relación a las diversas situaciones que se van dando, es necesario que la masa controle a sus dirigentes, que les pida cuenta periódicamente de su acción. Por esta misma razón los dirigentes deben ser revocables en cualquier momento, es decir, los dirigidos pueden retirarles el mandato y elegir otros representantes que cuenten con su confianza y que sean más capaces de conducir a las masas en las nuevas situaciones.
130. Cuando se aseguran las condiciones para que los dirigentes surjan de la masa misma, sean responsable ante ella y revocables en su mandato, se evita que los dirigentes se separen de las masas. Por el contrario, se crean las condiciones para que exista permanentemente una consulta entre los dirigentes y la masa.